La canción perdida

Perdí mi canción

en un diluvio de lágrimas,

a esa hora de la siesta

donde los ojos caen

y el cuerpo desfallece.

 

¡Qué dolor tan amargo

sin mi canción!

 

Morenita y chiquita,

tu nombre en mis oídos,

me resuena alegría,

con placer te busco

para danzar contigo.

 

¡Con qué tristeza

y con qué dolor

lloran mis ojos!

 

No quiero olvidar,

mi canción perdida.

 

Quizás

Morenita y chiquita

te guarde

en mis pensamientos

para no morir llorando.

Desplazamiento al inicio