Mire señora sombra,
no sabe mi inquietud
que me arrastra de años,
su invitación es su presencia
que alberga su sonrisa,
su imagen oscura
me tiene sin duda
desde su llegada en suspiros.
No tema a mi condena
que me frena mis impulsos
a decir lo que pienso,
años tras años
he esperado su visita,
para gritarle al tiempo
mi insólito amor
a su oscura belleza.
No piense mal,
un trozo de su figura
llevo esculpida
y no se desprende de su sombra,
en la penumbra un deseo
exigiendo un abrazo
y mi dicha sobrepasa
los límites del silencio.
Acepte sin temor mi invitación……..