El brasero

braseroEra el día más helado de invierno,

de lejos,

en medio de un silencio oscuro,

se escuchaba

el zumbido aterciopelado de un coche,

en la lejana carretera.

 

El blanco camino secreto,

se llenaba de lágrimas,

vivas y sonrientes,

que llenaban el día,

dentro de la cabaña.

 

La voz de un brasero,

se torcía en el aire

lentamente.

 

Era el día más helado de invierno,

sentada frente al brasero,

echando carbón

y papeles viejos

para dar lumbre.

 

El suave calor

reía en la habitación,

mientras afuera,

temblaba el frío.

 

Recordaba

aquellos días en el campo,

junto al brasero

de la abuelita.

 

¡Qué hermosos

aquellos días de infancia,

junto al brasero!

 

Te recuerdo

materia, fuego,

manzana, terrón de azúcar

y una calabaza con mate,

junto a esa imperiosa lumbre,

entre conversaciones y juegos,

temblaba el día

junto al brasero.

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